martes, 16 de enero de 2018

la piedra donde aró cristo



Cuando alguien encontró esta extraña formación rocosa a las afueras de Granátula, en el cerro de San Blas, en que unas líneas paralelas en forma de arco están grabadas en la piedra, la llamó la piedra donde aró Cristo, seguramente no encontrando otra explicación al fenómeno. Hoy nos cuentan que es una rizadura, en inglés ripple marks, fosilizada; es decir: ondas formadas en una playa, pues desde hace unos 500 millones de años, en la Era Primaria, esta zona fue varias veces litoral, antes de las erupciones volcánicas de la zona, cubiertas por otro tipo de sedimento que las protegió en el largo tiempo geológico. Estamos ante la tierra madre de antes de la actividad volcánica, ahora fosilizada, de lo que fuera una playa, pues el mar en aquellos lejanos días bañaba con sus olas lo que hoy son sierras en el borde de La Mancha.

Su acceso es fácil: desde la carretera de Almagro hacia Aldea del Rey, cogemos la primera entrada a Granátula y luego la primera calle perpendicular, que es la calle Almagro. Seguimos hacia el norte hasta las afueras del pueblo, hasta la ermita de San Blas, en que el camino se divide en dos atravesando una valla. Cogemos el más frontal, que lleva a un depósito de agua y que sube a las primeras estribaciones de la sierra. Arriba hay una pequeña meseta llena de grandes bloques cuarcíticos con forma de prisma rectangular más o menos regular. Entre estos bloques hay una especie de suelo cuarcítico con surcos paralelos y regulares, es la piedra que aró Cristo.
A la derecha puede verse esa meseta como un balcón que se asoma a la Vega del Jabalón y al maar de Granátula.



1 comentario:

  1. Un nombre tan particular como este para nombrar un elemento paisajístico tan especial como este, me huele enormemente a leyenda etiológica perdida...

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